Un clásico de Punta Arenas y parada obligada de los turistas. Un restaurant cálido, ameno y agradable, lleno de huellas de viajeros y de fascinados comensales que vivieron la experiencia de comer en un sitio original y con los sabores más deliciosos de sur de Chile. La especialidad acá son los pescados y mariscos, como el chupe de jaiba o el chupe de centolla magallánica./p>